29 de agosto de 2013

Apodos y formas de nombrar a una mujer


No me digas bombón, bomboncito, caramelo, caramelito y muchos menos que soy rica. No me gustan las abreviaturas y además, no soy una golosina comestible.
Todo lo que sea negra, negrita, gorda, gordita me suena a garca y despectivo.
Piba, pibita, flaca, flaquita me suena sobrador, es soberbio.
Ni hablar de cachorra, no soy una mascota.
Mama, mami, mamu o mamita además de que suena muy vulgar, habla de algo llamado "complejo de Edipo", informate.
Y bueno, bebé, bebota, bebotona, nena, nenita, nenota y todo lo que tenga que ver con la infancia me resulta perverso y desagradable.
Reina o princesa, tiene sus rollos pero es más aceptable. Princesa, a veces puede caer en un lugar bastante peligroso dentro del linaje femenino de la mano de Disney y el príncipe azul, pero a veces vale, depende el contexto y la forma.
Reina ya me suena pretensioso, me huele a poder y mucha edad, no me cierra.

Podes llamarme por mi nombre, por alguno de mis tantos sobrenombres o por el que elijas para mí.
Inventa un nombre que nadie me haya dado, sé creativo.
Me gusta la creatividad espontanea, es más sana y divertida.
De esta forma es más personal, así como un código entre nosotros, como un juego secreto, tiene su encanto.

La creatividad al poder, rompamos las estructuras, los linajes que traemos impuestos, corramos el velo, inventemos nuevas formas, seamos originales…

N.P.S

Agosto 2013 

18 de agosto de 2013

La batalla es siempre interna


Cuando atravesamos crisis profundas y oscuras o situaciones muy dolorosas, hablo de esas que se acomodan en los rincones del alma y se cuelan por todos los lugares posibles, se impregnan como brea y parece que no esta dispuestas a marcharse, siempre hay otro involucrado al cual culpar, responsabilizar o ante el cual declarar la batalla. Y si no hay un ser carne y hueso, entonces la culpa ¡la tiene Dios! Todas las sensaciones negativas, como el rencor, la ira, la bronca, la indignación, la impotencia y hasta el odio no son más que la angustia y el dolor pero en una etapa previa a los mismos, en otra parte del proceso. Reconocer las emociones, no es tan fácil como parece, la mente es muy picara, hay que estar atentos…
En los procesos de sanación profunda, de esos que nos llevan largos años o vidas, fui tomando conciencia cada vez con mayor claridad de que la batalla es SIEMPRE interior, siempre. A veces uno tarda más en darse cuenta o en poner la atención hacia adentro, y en general eso pasa cuando hay un momento bisagra en la situación. Hacerse cargo e implicarse en cada sensación que pensamos que el otro nos detona, nos puede cambiar la forma de ver la vida y de atravesar estos procesos tan difíciles como inevitables. Quizá sean menos dolorosos, o mejor dicho vamos a sufrir menos y vamos a ganar mucho más si elegimos cambiar el foco y el eje.
Mucho se ha dicho y escrito y a todos nos gustan las frases lindas y sabias, pero cuando ponemos cuerpo y alma y realmente comenzamos a reconocer en nuestras vidas que uno puede “controlar” o más bien, hacer consciente que el otro es solo un espejo y que es uno quien tiene que perdonar, aceptar, soltar, sanar y hacerse responsable de esa parte afectada para poder ser más transparente, más sano, más consciente, para poder elevarnos y ser más evolucionados como seres humanos, la cosa cambia. Porque estoy convencida que estamos acá para eso; para AMAR y amar incondicionalmente, que también suena a frase de señalador, y es un trabajo arduo el que hay que hacer para poder lograrlo o al menos sentirlo, alguna vez en la vida. En ese punto, los hijos son los mejores Maestros, el amor incondicional brota como un manantial infinito con nuestras crías, es casi innato, divino. Pero que complejo es amar al mundo, amar al desconocido, amar al que nos lastimo tan profundo…sin embargo, TODOS somos Maestros y cada vínculo que formamos, fugaz o eterno, nos viene a enseñar algo. Perder esa posibilidad de crecimiento interior, por la ceguera del corazón, es realmente un inmenso abandono a uno mismo y a la oportunidad de poder ser más luminosos y consientes.
Decía, la batalla es siempre interna, con nuestros fantasmas, nuestras sombras, con nuestra historia, con nuestras palabras y desde nuestra óptica personal, claro. Hace muy poco, gracias a una situación límite y delicada, comprendí esto de que “el otro juzga u opina a partir de su propia óptica-cristal-experiencia” antes creí comprenderlo pero ahora de verdad me di cuenta a que se refería eso. Y que cierto es y cuanto alivio siente uno al comprenderlo porque entonces esa crítica descalificativa, o esa falta de empatía y comprensión que a veces tanto nos duele (más a las mujeres) no es más que algo del otro, una falta, una sombra, algo que esa persona no logra aun ver o sanar en sí misma y solo proyecta o señala afuera, porque desde su experiencia interior no puede hacer otra cosa ¡No puede! No lo vivio, o no sabe como ponerse en tus zapatos, opina desde su propia experiencia personal. Lo mismo cuando sucede al revés o cuando es uno el que aún no vivió determinada situación. No se trata solo de ignorancia, frialdad, maldad o como queramos llamarlo, simplemente no lo sabe porque no esta dentro suyo ¿Cómo puede saberlo? Es por eso que mientras más experiencias variadas una persona haya vivido y atravesado, más empática se vuelve, más receptiva, más sensible, es más rica en vivencias…no sé que palabra usar para explicar lo que siento o lo que pude ir deshilachando en la práctica de vivir, de poder ir descubriendo quienes somos los seres humanos y de que formas funcionamos.
Me apasiona la mente humana, me produce un magnetismo y una curiosidad fanática, soy psicóloga, escritora, artesana ¡lo que sea! porque necesito desglosar y entender, hasta donde puedo y más allá también, esa sed de conocimiento es el motor de la búsqueda, siempre. Y si algo aprendí es que los libros tarde o temprano deben cerrarse, para abrir el de adentro que es un tesoro único en cada uno. Ahí esta todo, no hay otro lugar donde buscar.
Y abrir esa puerta con tantos candados y hacernos cargo y no barrer más bajo la alfombra, deshacer el ego, romper las barreras y liberarnos desde adentro hacia fuera, es tan difícil como maravilloso. Librar esa batalla es para valientes, tirar la culpa siempre afuera es triste, es cobarde. Parece que los héroes victoriosos eran los que derrotaban a un otro o a “el malo” pero yo creo que los verdaderos héroes, esos que merecen aplausos de pie, son los que se animan a abrir el corazón y dejarlo latiendo ahí, a la intemperie, en medio de tantas bestias, son los que eligen hacerse cargo de su propia vida y sus propios fantasmas, para dejarlos ir, para transformar toda esa energía, para liberar el peso de una vida y una historia que ya nos peso bastante, para poder volver a nacer y ser mejores seres humanos, ser más divinos y sutiles, ser más nobles y dignos, esos son los verdaderos héroes, los que se enfrentan a sí mismos. Los que abren las jaulas, los que miran de frente, los que saben lo que es la oscuridad más infinita y a ciegas igual, tuvieron la fuerza de seguir buscando sin perder la fé, los que han elegido empezar a mirar para adentro, a despertar. La batalla más difícil es enfrentarse a uno mismo, requiere de un valor muy grande.
Esos son héroes.

No hay nadie halla afuera, solo tu sombra esperándote.

N.P.S

18-08-2013


10 de agosto de 2013

Una duda que me escarba el pecho

No se que no me gusta.
No se si es el pasado.
No se si es una defensa.
No se si lo reprimo.
No se si son mis mambos.
No se si es la mente o el corazón.
No se si lo vale.
No se si tengo ganas.
No se si hay voluntad.
No se si es necesario.
No se si es un capricho.
No se si es sincero.
No se si es real.
No se que me gusta.
No se si es el futuro.
No se si me cayo. 
No se si me caigo.

Pero lo más triste
es que no se si hay AMOR.

Y yo, no se que hay cuando eso falta.

N.P.S
10-08-13

7 de agosto de 2013

El sistema nos prefiere inútiles


Inutilidad e ignorancia, dos grandes aliados del sistema en el cual estamos inmersos, en mayor o menor grado, pero sin una salida completa posible. No hace falta ser demasiado inteligente para notarlo si tal vez ser observador, cuestionarse lo establecido y el maldito “avance” de la tecnología, que para mi siempre va a ser un retroceso en lo que respecta a los vínculos humanos nobles, sensibles y cercanos en todos sus aspectos.
Es impresionante tomar conciencia de cada detalle, desde lo más micro a lo más macro el sistema continuamente nos vuelve dependientes, consumistas e inútiles ¿Con que objetivo? Plata, poder, acumulación y más y más plata, ese veneno que da vueltas por todo el mundo y en realidad no vale nada. Partiendo de lo esencial, es decir desde la vivienda y todo lo que esta incluye (luz, gas, calefacción, etc) así como en la alimentación misma y otras cientos de cosas, el sistema te provee de, cuando TODO esto esta presente en la naturaleza y podemos obtenerlo y construirlo con nuestras propias manos sin dañar a ningún ser vivo, sin contaminar, sin dinero (…) pero claro: cuesta esfuerzo y tiempo, dos valores que en nuestra sociedad de consumo conectada a 220, consumista, capitalista, en la era donde todo es rápido, fugaz, superficial…¿Esfuerzo y tiempo? Justamente la tecnología trabaja sobre la rapidez, suprimir mil funciones en un solo aparato (como el celular) y que todo el tiempo salgan nuevos, como si fuera una plaga que se autoreproduce continuamente, para hacerte sentir que tu computadora, televisión, celular, auto y ¡¡¡tu vida misma!! tiene que cambiar porque es vieja, obsoleta, ya no sirve ¡Y de reciclar no hablemos! No enserio al menos. Es realmente tétrico, a mi me produce una sensación abismal todo el mundo de lo virtual, donde se va perdiendo cada vez más el cara a cara, las cartas, los libros, todo eso tan hermoso que uno hace con amor, dedicación, que es original, creativo, personalizado. Se pierden los vínculos, la comunicación, todo se va alejando, disolviendo, me resulta muy triste.
Hoy, por ejemplo, en un estacionamiento vi unos códigos raros pegados en la pared. Como no entiendo estas “cosas nuevas” (por suerte, estoy como mi abuela) una amiga me conto que apoyas el celular y se te graba el lugar donde esta el auto. Impresionante. No sea cosa que ejercites tu memoria ¿Para que? total el celular lo hace por vos. Las maquinas nos van suplantando, así como paso en lo laboral, ahora nos suplantan cognitivamente, físicamente y emocionalmente, también y a todo eso la tecnología lo llama AVANCE, aún no entiendo el sentido.
Se me representa la imagen de una persona sentada, en una silla, como realizando la fotosíntesis. Un ser humano que ha quedado totalmente vacio, acostumbrado a que siempre hagan todo por él, a depender del sistema en cada esfera de su vida, en dejarse suplantar por un teléfono, un chip, un robot…¡Quien sabe! Y esa imagen me genera mucha tristeza, me parece degradante y de progreso no tiene nada.
Tenemos todo el potencial para vivir de una manera sana, plena y consciente con lo que naturaleza nos provee y sin embargo seguimos comprando, consumiendo, nos dejamos engañar un y mil veces creyendo que necesitamos algo que en realidad no nos hace falta. Cuestionarse lo que resulta obvio me parece fundamental, informarse sobre otras formas y maneras, no actuar y vivir por inercia llevados por la masa como si fuera un mar inconciente que no sabe a donde va, pero va porque hay que ir o porque todos van. Somos seres dotados de inteligencia, con dos manos hábiles  ¿Cómo podemos dejarnos influir de esta forma? ¿Cómo podemos permitir que una maquina nos suplante continuamente? ¿Por qué la comunicación nos incomunica y nos aleja de una manera tan definitiva e irrefrenable?

Rompamos los paradigmas, cambiemos las formas, creemos alternativas, eduquemos a las generaciones venideras desde otra óptica donde los valores humanos estén presentes, donde sea más importante abrazar que mandar un mail, mirar a los ojos y escuchar la respiración, antes que chatear por donde sea, donde tome valor la mano de obra, la dedicación, el detalle personal y la magia que cada uno posee y puede plasmar.

Abracemos el cambio, el cambio sos vos.

N.P.S

Agosto 2013 



4 de agosto de 2013

Limpieza alquímica


Que limpie el viento, que se lleve
todo aquello que ya es pasado. 
Que absorba la tierra, que sepulte 
lo muerto, lo roto, lo que ya no es.
Que purifique el agua, que lave 
que sedimente en sus profundidades lo obsoleto. 
Que queme el fuego y desintegre 
todo lo necesario para ser libre,

que se transforme la energía, se libere. 


Dejar espacio para lo nuevo, dejar espacios vacíos; darse ese permiso. 
Los movimientos internos producen movimientos externos, 
todo esta íntimamente relacionado, no se puede separar lo indivisible.


N.P.S
03-08-13 


1 de agosto de 2013

Presente en el presente


Soñar lo real
Realizar lo utópico
Celebrar la esencia
Lograr lo imposible
Vivir lo onírico
Poblar lo espontaneo
Compartir lo sagrado
Profundizar la huella
Eternizar la sonrisa
Sostener el silencio
Habitar la palabra
Existir en el vacío
Penetrar la nada
Sorprender al destino
Resistir a lo ilusorio 
Entregarse al todo
Amar la verdad

Ser el amor
y el amor, hacer.


N.P.S
01-08-13